martes, 27 de octubre de 2009
Día de Muertos
viernes, 9 de octubre de 2009
Ocultamiento
domingo, 27 de septiembre de 2009
El autor y la escritura.
domingo, 13 de septiembre de 2009
Una historia de mierda
Mito de perros. Nahuas de Zongolica, Veracruz.
sábado, 5 de septiembre de 2009
estas ruinas que no ves
acelerar, perder el control...
viernes, 28 de agosto de 2009
Cogito ergo sum
domingo, 23 de agosto de 2009
Diálogo en el camino II.
Diálogo en el camino.
jueves, 6 de agosto de 2009
Eterno Nietzsche
He vivido durante tanto tiempo como un salvaje, en tierras extrañas y salvajes, que ahora que vuelvo a ti asoma el llanto a mis ojos. Amenázame con el dedo, como amenazan las madres; sonríeme, como sonríen las madres y dime: "¿quién fue el que un día se alejó de mí, como un tormentoso viento? ¿Quién fue el que se despidió de mí diciendo: he pasado tanto tiempo en soledad que hasta me he olvidado de guardar silencio?"
Así habló Zaratustra
miércoles, 5 de agosto de 2009
Sí
miércoles, 22 de julio de 2009
De Lizalde a Schulenburg
Hacía ya tiempo que no me sentía tan desenfadado, sorbía el vino sin prisa mientras intentaba romper el hielo con la dama de los cigarros y esperar el momento exacto para dejar de beber y disfrutar de un cigarrillo, el cual iba gentilmente a pedir, lo que hubiera pasado si no hubiera seguido la broma y hacerme pasar como trabajador del IMER, pero la sonrisa cómplice fue irresistible, lo cuál no inmuto al personaje, que me extendió su queja sobre la forma de zopilotear al personaje homenajeado, en éste caso a Eduardo Lizalde.
El buen Andrés entonces me explica acerca de los zopilotes, creaciones para la televisión de la que al parecer el sabe mucho, remembranzas de la vida de algún personaje y que salen casi al momento de que han dejado éste mundo, me explica mientras contemplo la extraña belleza de Citlali, o acaso su escote y mientras siento que la dama de los cigarrillos se aparta, pero que más da, lo de los zopilotes estaba interesante, prosigue Andrés que estos ya están hechos, así me dice, Chabelo tiene el suyo, Jacobo ¿Zabludovsky? También y empezamos a intercambiar opiniones sobre el verdadero sentido del homenaje; para él, el trato que se le dio al evento por parte del IMER parecía más un intento de zopilote, que un merecido homenaje por recibir la medalla de Bellas Artes.
Zopilotear rara manera de verbalizar los sustantivos, viene a mi mente mientras me despierto al otro día con la noticia sobre la verdadera Gunajuatización, aunque creo que nadie entendió bien a bien que quiso decir Germán en realidad, triste actuar de los políticos que una vez ya metida la pata en lugar de aceptar el error prosiguen en la idiotez y así Guanajuato presume de mantener a 52% de la población en la pobreza y a 20% en la pobreza alimentaria, según el Universal del 20 de julio de 2009. Mientras me pregunto como sería si quisiéramos exportar el chilango power a los rincones del planeta, o de México de pérdida y salen verbos como: DFralizar, aDFiar, aDFear, DFcar o DFender.
A la vez que también me enteró de la muerte del ex abad de
Vaya paradoja, para Ernesto de
Por un lado el mitificador a través del lenguaje, por otro, el desmitificador, el de la certeza histórica antes de la irracional fe, "hombre de fe, no de necedad" diría Gonzáles de Alba.
¿Cuál visión ha de ser la correcta? Por que el mundo ha dejado de tener significado, me inclino por el mito, sin olvidar que hay una realidad delirante y enferma, no creo que debamos dejar ninguna. El tigre ha de proseguir.
Al parecer en el IMER necesitan un experto en medios especificamente en radio.
sábado, 18 de julio de 2009
...de regresos...
No creo en los regresos espectaculares, ni en las vueltas repentinas del destino, quizá mi pesimismo, mi falta de apetito, sé de las consecuencias y he de aceptarlas. De las ruinas es difícil ya sacar algo, aun así en ocasiones es posible desearlo aunque sea la frustración lo que al final prevalezca, la que bien describe Albert Camus, en el monólogo interior de Meursault antes de ser ejecutado.
“Lo que ahora me interesa es escapar a la mecánica, saber si lo inevitable puede tener una salida” “… no sé cuántas veces me he preguntado si había ejemplos de condenados a muerte que hubiesen escapado al mecanismo implacable, desaparecido antes de la ejecución, roto los cordones de agentes.”
“Que, al menos en un caso, la rueda se había detenido, que en esa premeditación insoportable, el azar y la fortuna una vez tan sólo habían cambiado algo. ¡Una vez! En un sentido creo que eso me hubiera bastado. Mi corazón habría hecho lo demás. Los periódicos hablaban con frecuencia de una deuda contraída con la sociedad. Era necesario, según ellos, pagarla. Pero eso no habla a la imaginación. Lo que importaba era una posibilidad de evasión, un salto fuera del implacable rito, una loca carrera que ofreciese todas las vías de la esperanza. Por supuesto, la esperanza era ser abatido en la esquina de una calle, en plena huida, de un tiro al vuelo. Pero considerándolo bien, nada me permitía ese lujo, todo me lo negaba, y volvía a ser presa de la mecánica.”
La muerte aquí será el evento que lo saque tanto al él de su indiferencia ante el mundo como del mundo ante él.
A veces los gritos de odio son un aliciente, desgraciadamente es improbable volver atrás, cambiar las cosas.
No hay añoranza de un tiempo pasado, pues no es melancólico lo que explica los regresos y no es a partir de ahí que habría que entenderlo si no a partir del tedio.
El tedio se define, en primer término, en virtud del presente, o mejor: el tedio no posee ni pasado ni futuro, en tanto que la melancolía se caracteriza por la añoranza de un tiempo pasado (o posiblemente de un futuro que esperamos se produzca)
En su libro La repetición Kierkegaard sostiene que el melancólico es aquel que vive en la rememoración, es decir, alguien que reproduce retrocediendo, mientras que “la verdadera reproducción tiene lugar hacia delante” “la auténtica reproducción es trascendencia” para Kierkegaad, que conduce hacia la felicidad.
Por el contrario el tedio es inmanencia pura, siguiendo con Kierkegaad, afirma que o bien la reproducción es imposible, o la vida se descompone en material vacío, sin contenido.
No se puede negar que vivimos llenas de afecciones y sí que podemos recobrar alguna, es el caso de la magdalena mojada en el té de: En busca del tiempo perdido. Vol. I, Por el camino de Swann de Proust. Aunque en este sentido escribe:
“Y así sucede también con nuestro pasado. Es trabajo perdido intentar evocarlo, todos los esfuerzos de nuestra inteligencia resultan inútiles. Está oculto fuera de su dominio y de su ámbito, en algún objeto material (en la impresión sensorial que dicho objeto podría proporcionarnos) que ni siquiera sospechamos. El que encontremos o no dicho objeto antes de morir, depende del azar”
Así, sin previo aviso, mediante una evocación involuntaria, una afección del pasado puede despertar en nosotros.
Podemos esperar largo tiempo, un instante que no llegará jamás, es así con los personajes de Beckett, los cuales van adquiriendo una perdida de sentido y de una ausencia de metafísica que no es capaz de dar sentido alguno. Solo existe el tiempo, demasiado tiempo, en un universo en el que nada sucede. Se puede evitar la espera del instante; sin embargo es una ambición que se resiste a cumplirse del todo:
“Querría, el llamado espíritu que desde hace ya tanto tiempo ha perdido toda capacidad de querer. El mal llamado espíritu. Por el mal llamado instante. A fuerza de querer tanto tiempo, todo querer arrebatado. Querer largo tiempo en vano. Y seguiría queriendo. Vagamente, en vano, seguiría queriendo. Más vagamente aún. Vagamente, vanamente, querría que el querer fuese el minímo. Mínimo de querer imposible de minimizar. El vano mínimo de seguir queriendo, imposible de apaciguar.
Querer que todo desaparezca. Que desaparezca la falta de claridad. Que desaparezca el vacío. Que desaparezca el querer. Querer en vano que querer en vano desaparezca”
La nave vuelve a zarpar…
Te soñé desnuda antes de la evocación, presagio enternecedor, en el sueño no era yo quien se llenara de esa desnudez, no creo en los presagios del sueño, pero fue así.
martes, 14 de julio de 2009
...consecuencias...
Cuestión de prospectiva
Islas a la deriva
martes, 16 de junio de 2009
UNAM: del Príncipe de Asturias al Che Guevara
Razones
Jorge Fernández Menéndez
La Universidad Nacional Autónoma de México es un microcosmos (ni tan micro), una suerte de laboratorio social de nuestro país: en ella se dan cita lo mejor y lo peor, las contradicciones sociales y las posibilidades enormes de nuestra sociedad; la rigurosidad y la impunidad; los funcionarios y los académicos más talentosos y eficientes y los grillos más nefastos de la política nacional. Con sus 300 mil estudiantes, sus decenas de miles de trabajadores y académicos, en la UNAM hay espacio para todo y para todos.
Que la Universidad Nacional haya sido galardonada con el Premio Príncipe de Asturias, sólo puede llenar de orgullo a la comunidad universitaria y a la sociedad, que realiza un esfuerzo enorme por financiar, mantener, sostener el trabajo de ésa y de todas las universidades públicas. En lo personal no le debo todo, pero sí mucho de lo mejor de mi vida a la Universidad Nacional y siempre estaré en deuda con ella. Por eso mismo me fascina la UNAM de la rigurosidad, de la investigación, de la imaginación política y cultural, de la rebeldía con objetivos, del campus envidiable, de los jóvenes que por esa vía aspiran a labrarse su futuro. Las autoridades, incluido el rector José Narro,representan dignamente mucho de esa universidad.
Pero esa UNAM, que es la que recibió el Príncipe de Asturias, sufre cada vez que se topa con patanes como los que la tuvieron cerrada durante un año y que desde entonces tienen tomado el auditorio Justo Sierra, ahora denominado Che Guevara, para convertirlo, no en un símbolo, legítimo o no, de rebeldía y de búsqueda de nuevos caminos u opciones sino, lisa y llanamente, de suciedad y abandono, que sirve para alimentar a grupos delincuenciales. Son los mismos que mantienen los puestos de vendedores ambulantes y los grupos clientelares, los que se dedican al narcomenudeo en las islas y que castigan a la Universidad y sus integrantes en forma cotidiana.
La Universidad pudo renacer de las cenizas de la huelga de 99 porque dio una muestra de inteligencia y tolerancia, también porque pudo ser firme y deshacerse de algunos de sus enemigos internos. Es verdad: no se puede pretender gobernar a la UNAM como si fuera una ínsula en el país, pero tampoco puede asimilarse como un reflejo de la impunidad. Y, en ocasiones, la autonomía (que debe servir para cultivar la imaginación, la libertad, establecer objetivos propios en todos los terrenos, sin la intromisión de los grupos de poder o del Estado) termina siendo un sinónimo, para esos grupos, de extraterritorialidad que daña la imagen y la operación de la máxima casa de estudios. Si la UNAM es un microcosmos de la sociedad y del país, el abuso en la autonomía y, por ende, de esa suerte de extraterritorialidad, se asemeja al fuero del que gozan quienes han sido electos funcionarios públicos y que protege, no la libertad y el accionar político, sino otorga una suerte de patente de corso para realizar cualquier actividad lícita o ilícita. O a las zonas indígenas regidas por sus usos y costumbres que pasan en tantas ocasiones de una defensa legítima de la identidad a convertirlos en un instrumento de la discriminación y la ilegalidad.
No hay términos absolutos en estos temas y eso es comprensible, pero lo que debe haber son reglas del juego más claras. La UNAM tiene muchos enemigos, dentro y fuera, incluso entre quienes se presentan como sus amigos. Puedo comprender que quizá no se puedan impedir las actividades de las FARC en el campus, pero resulta incomprensible que el Consejo Universitario reivindique la figura de una estudiante que simplemente estaba cometiendo un delito y participando en una organización que el mismo país y el mismo gobierno que ahora le otorga el Premio Príncipe de Asturias, considera un grupo terrorista y ligado al narcotráfico.
La batalla de la Universidad pasa por lograr mantener el nivel de calidad académica que el país requiere de sus universidades públicas. Sólo así podrá seguir siendo el trampolín social que fue y en muchos terrenos continúa siéndolo. Hay quienes quieren masificarla (en el sentido de que pierda uno de sus principales atributos, la fortaleza de sus grupos de estudiantes y académicos de élite) y convertirla en un receptáculo de jóvenes sin trabajo. Hay quienes esperan que la UNAM se debilite para fortalecerla desde opciones académicas privadas de dudosa o nula calidad, hasta escuelas de origen político cuestionable (como la llamada Universidad de la Ciudad de México, una de las menos serias inversiones públicas del lopezobradorismo).
Yo no sé si por la raza puede hablar el espíritu, pero sí que, en una nación multicultural, con un espíritu que transita por demasiados recovecos y en muchas ocasiones es ciclotímico, necesitamos una Universidad Nacional fuerte, inteligente, plural y tolerante, pero que no parezca indolente ni permisiva contra quienes aspiran a destruirla. La Universidad del Premio Príncipe de Asturias se debe imponer a la de los secuestradores del auditorio Che Guevara o Justo Sierra, el nombre es lo de menos.
Luz sin fuerza
Acabo de leer la columna de Germán Dehesa sobre sus penurias con el servicio eléctrico en la capital del país y no deja de ser reconfortante (es una forma de decirlo) saber que somos muchos los que sufrimos de sus deficiencias. Hace algunas semanas mi recibo de luz llegó por más de 23 mil pesos (una cantidad que crece geométricamente cada dos meses) y la única opción ha sido pagarlo para seguir contando con el servicio. El único problema es que el servicio eléctrico se suspende un día sí y el otro también. Y lo hace con golpes de energía que terminan fundiendo todo tipo de equipos eléctricos. No se trata de buena o mala voluntad, que hay de ambas en funcionarios y trabajadores, se trata de asumir que el servicio y la empresa están lejos de las exigencias mínimas de la Ciudad de México.
Que la Universidad Nacional haya sido galardonada sólo puede llenar de orgullo a la comunidad universitaria y a la sociedad.
Mi destino no es la tierra sino el mar.
viernes, 12 de junio de 2009
...de Migración...
Hernán Vega Burgos, renunció a su cargo como delegado del Instituto Nacional de Migración (INM) en Yucatán, tras las indagatorias en su contra por la presunta comisión de diversos delitos.
Hay más datos que pueden ayudar a dar con la prófuga y que podrían, además, aclarar hasta dónde llegó la red de prostitución… si es que hay voluntad para hacerlo. Keysi Johann era la encargada de traficar mujeres de Costa Rica a Yucatán, nos dicen. Nacida en Central Alajuela, Costa Rica, el 13 de noviembre de 1970, tiene la cédula de identidad 204640379, con fecha de vencimiento el 17 de febrero de 2019. Keysi radicaba en Mérida desde hace algunos años, pero viaja con frecuencia a su país natal. Era conocida en Migración. Iba a saludar a Hernán Vega Burgos y, de paso, a ofrecerle “servicios”, según datos recabados por el diario Por Esto!. La explotación sexual de mujeres desamparadas desde una dependencia federal parece algo serio. ¿Hasta dónde llegará la investigación?
lunes, 8 de junio de 2009
Alejandro Rossi (Florencia 1932-Ciudad de México 2009)
sábado, 6 de junio de 2009
Las 10 mejores frases de Kung Fu (El Universal 5 de junio de 2009)
1. Se ha dicho que un sacerdote Shao-lin puede atravesar las paredes; si lo buscan, nadie lo encuentra; si lo escuchan, nadie lo oye; si lo tocan, nadie lo palpa. Tu pisada debe ser corta, como si estuvieras pisando papel de arroz. Este papel de arroz es la prueba, frágil como las alas de la libélula. Cuando puedas recorrer su longitud sin dejar rastro, habrás aprendido.
2. Hay acciones que no se pueden añadir o quitar, a veces la única opción es no hacer nada, lo que ha de pasar, pasará.
3. A veces hay que cortar un dedo para salvar una mano.
4. No soy un mestizo, ni un chino, soy Kwai Chan Kane.
5. Aquello que no sepas, la práctica te lo solucionará rápidamente.
6. No es una deshonra perder si has buscado ganar.
7. Maestro, si hay dos caminos, uno a la derecha y otro a la izquierda, ¿cual sabré yo que me llevará a mi destino?
—No importa cuál camino escojas, el de la derecha o el de la izquierda, cualquiera te llevará a tu destino.
8. ¿No es mejor verte a ti mismo con sinceridad a querer verte como te ven los otros?
9. Un Shao-lin nunca lucha a muerte si no es inevitable.
10. El hombre que actúa con perseverancia, a la larga acaba encontrándose.
...de David Carradine (1936-2009)
Lo encontré hace ya más de diez años en mi televisor, protagonizaba una serie donde el kung-fu era el eje. No era el típico guerrero megamamado recetando madrazos, quizá todo lo contrario, pero su figura ya gastada derrochaba serenidad, los pasos siempre lentos, tranquilos y sin prisa contravenian a lo que se pudiera esperar de una serie donde los golpes son el principal ingrediente.